Son parte de la nueva línea de Nieto Senetiner, que incluye un Malbec D.O.C. y un Semillón.

Año de cambios para Nieto Senetiner, que este 2022 reformuló su imagen bajo el lema “Historia en movimiento”, que busca reflejar su constante movimiento a lo largo de más de ciento treinta vendimias. Pero además del perceptible cambio de imagen y de logo, la bodega mendocina alumbró una línea en homenaje a los varietales históricos que dieron origen a la vitivinicultura argentina, llamada Patrimonial.

“Siento que hay un gran valor en rescatar la herencia y patrimonio varietal de Mendoza, que es de larga data -comentó Santiago Mayorga, enólogo de la bodega-. Nuestra idea es expresar su potencial enológico en ejemplares de alta calidad, sumado a la autenticidad de cada vino. Elegimos cuatro varietales muy distintos y auténticos para esta línea: Malbec D.O.C., Semillón, Bonarda y Criolla Grande. Cada uno en su estilo habla de innovación.”

Para los fans de Nieto Senetiner, el Malbec D.O.C. y el Semillón pueden ser caras conocidas, ya que la bodega trabaja estos dos vinos desde hace años en líneas anteriores a la reformulación de marca. Nieto Senetiner Patrimonial Malbec D.O.C. es ya un ícono de la bodega, siendo uno de los pioneros en la Denominación de Origen Controlado Luján de Cuyo, mientras que Nieto Senetiner Semillón es una versión renovada del clásico de la bodega, que ahora toma sus uvas de Tupungato, Valle de Uco.

“Nuestro Malbec D.O.C. honra a la primera zona de Luján de Cuyo, donde nace el Malbec en Argentina. Son viñedos de entre 10 a 100 años de antigüedad, tratados con un sistema de poda especial y con rendimientos menores a 70 hl/ha, con lo cual logran una madurez adecuada y representan al terroir de Luján de Cuyo”, explicó Mayorga.

En cuanto al Semillón, el enólogo señaló: “Solía ser la segunda variedad blanca más plantada, además de ser la compañera del Malbec en llegar a Argentina en el siglo XIX. Es una cepa muy especial, que requiere un particular cuidado en el manejo del viñedo y en la cosecha ya que posee una piel fina y es de maduración tardía. En nuestro caso, elaboramos una versión muy refinada, con algo de fermentación en barricas de roble francés, logrando un blanco elegante, gastronómico y de excelente potencial de guarda.”

Pero la línea Patrimonial tiene dos nuevos vinos en este 2022, una Criolla Grande y un Bonarda, como no podía ser menos en una bodega pionera en el desarrollo de alta gama para esta variedad. “En este Bonarda, encontramos la fiel expresión de Agrelo, Luján de Cuyo. En cuanto a estilo, podemos ubicarlo entre los vinos del nuevo mundo, donde resalta la concentración de color, pero sin perder la elegancia y la fineza de su acidez”, comentó el enólogo Roberto González.

Nieto Senetiner Patrimonial Bonarda 2021 tiene cierto espíritu de Beaujolais. Es un tinto de fruta nítida, sobre un fondo floral, que en boca es suave y fluido, de taninos muy finos y maduros, y una acidez alta y jugosa. Súper gastronómico. Por su parte, Nieto Senetiner Patrimonial Criolla Grande 2022 es un tinto rojo brillante, de aromas a cereza, que en boca en suave y levemente envolvente. Taninos minimos, acidez media y una simpática notita amarga al final. Un pequeño gran vino de sed.

“Nuestra línea Nieto Senetiner Patrimonial busca llevar al frente varietales que son parte de nuestra historia. En esa búsqueda, elegimos Criolla Grande, un cruzamiento natural local entre Criolla Chica y Moscatel de Alejandría“, destacó Mayorga, y agregó: “nos sorprendió por su simpleza y austeridad, pero, a la vez, su intensidad de fruta, frescura y equilibrio”.